Conjuros

Te conjuro
lejos
junto a los hijos que no tuvimos.
Libre de los besos
que habitan los huecos de tu cuerpo
de los colores que invocamos
bajo el lechoso invierno.

Todos los hechizos que lancé quedarán sin efecto,
retornaran las luciérnagas a sus guaridas
y entre tanto ramaje para quemar,
buscaré algo concreto
con lo que pueda seguir existiendo.

4 comentaris:

  1. El sonido del viento desplaza lamentos, almas desahuciadas por el desconocimiento que impone la tiranía.

    Un mochuelo navega en las montañas que unen la mar con los pliegues de tu alcoba, cuando me situó junto a tu recuerdo siento que el universo existe, las paredes se llenan de color y en la palabra cobro vida...

    ResponElimina
  2. Entre hechizos y curanderos

    Hace mucho tiempo antes que mis ojos se abrieran a la luz
    me cubrieron con la bendición de los ancestros que habitaron los cielos, protegiéndome y entre las sombras y los sonidos que inician la melodía.

    En mi primer amanecer observe un mundo lleno de poesía pero que pocos se atreven a describir esa realidad.

    La palabras que brotan de este manantial recorren tu piel y la abrazan, refrescan la vida con nuestros pies descalzos al comenzar el vuelo.

    ResponElimina
  3. Entre hechizos y curanderos

    Hace mucho tiempo antes que mis ojos se abrieran a la luz
    me cubrieron con la bendición de los ancestros que habitaron los cielos, protegiéndome y entre las sombras y los sonidos que inician la melodía.

    En mi primer amanecer observe un mundo lleno de poesía pero que pocos se atreven a describir esa realidad.

    La palabras que brotan de este manantial recorren tu piel y la abrazan, refrescan la vida con nuestros pies descalzos al comenzar el vuelo.

    ResponElimina
  4. Entre hechizos y curanderos

    Hace mucho tiempo antes que mis ojos se abrieran a la luz
    me cubrieron con la bendición de los ancestros que habitaron los cielos, protegiéndome y entre las sombras y los sonidos que inician la melodía.

    En mi primer amanecer observe un mundo lleno de poesía pero que pocos se atreven a describir esa realidad.

    La palabras que brotan de este manantial recorren tu piel y la abrazan, refrescan la vida con nuestros pies descalzos al comenzar el vuelo.

    ResponElimina